Santo ángel, mi guía celestial, a quien tantas veces he entristecido con mis pecados.
No me abandones. Te lo ruego.
En medio de los peligros, no me retires tu apoyo.
No me pierdas de vista ni un solo instante, sino que tus amables inspiraciones dirijan y fortifiquen mi alma, reanimen mi corazón desfallecido y casi apagado, porque está sin amor:
Comunícale alguna chispa de las llamas suaves y puras que te abrasan, a fin de que cuando llegue el término de esta vida pueda en tu compañía y la de todos los Ángeles obtener la vida eterna y ver sin cesar a Jesús, amarlo, alabarlo y bendecidlo.
Amén.
Cuatro esquinitas tiene mi cama cuatro angelitos que me la guardan Lucas, Marcos, Juan y Mateo La Santísima Trinidad en el medio.
Dios es mi padre, La Virgen es mi madre los Ángeles mis hermanos, me tomaron de la mano, me llevaron a Belén de Belén a la fuente me pusieron cruz al frente, para que el diablo no me tiente ni de día ni de noche ni en la hora de mi muerte.
Amen...
Ángel de mi guarda mi fiel compañero corta con tu espada mi temor y miedo santo sacramento ten piedad de mi que estoy en pecado desde que nací.
Amen...
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