jueves, 17 de abril de 2008
¿Haz visto la soledad?
¿Has visto la soledad?
¿Has sentido en tu corazón
la soledad...?
...la soledad va más allá de lo
que tú y yo hemos vivido...
¿Quieres ver la soledad?
Mírala en esta foto...
La soledad se viste del color del atardecer, un color gris, como está el
cielo antes de llover,
la soledad tiene la delgadez de un día de invierno,
la soledad tiene la piel como la tez de un árbol.
A la soledad no le puedes ver a los ojos,
pues si los tuyos los vieran, no lo soportarías,
y caerían de ellos lágrimas de amargura y tristeza...
La soledad está atada a su madre... a la madre tierra,
sus brazos están marchitos de tanto soportar esas cadenas, (no lo
soportan más...).
Su cabello es largo... como sus penas y sus nostalgias.
La soledad vive allí, donde nadie la puede ver, allí donde el sol sale, la
luna se esconde, los árboles crecen...
Sus recuerdos son cafés, como cada corteza de la selva... ya los
recuerdos son golondrinas pasajeras, golondrinas que buscan un mejor
nido.
¡No te jactes de decir que conoces la soledad!
¡No la conoces! (ni la conozco).
Con un grito desesperado desde lo más
profundo de mi alma te digo: ¡Soledad!...
tu corazón marchito me hace un nudo en la garganta, y me inunda los
ojos de lágrimas,
¡no puedo verte más, no puedo tocarte más!,
me tortura tu imagen, ¡me tortura!,
tienes mi nostalgia a flor de piel,
suelta mi cuerpo y mi espíritu,
me siento sin aliento...
¡Me matas! soledad...
Este escrito lo he tomado prestado del blog http://www.lacoctelera.com/gotas-de-rocio
me impactó tanto que he decidido compartirlo con ustedes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario